Si le ha mordido un perro, no sólo querrá recuperarse física y económicamente de sus lesiones, sino también asegurarse de que ese animal peligroso no vuelva a atacar a nadie. A pesar de ser el mejor amigo del hombre, hay perros que han sido adiestrados para ser viciosos o que son demasiado agresivos por naturaleza para estar con seguridad cerca de extraños. Nadie tiene por qué pasar por lo que usted pasó, y por eso Chicago cuenta con una ordenanza para hacer frente a este tipo de situaciones. La ley de Chicago establece castigos para los propietarios de perros peligrosos y, en algunas situaciones, exige que se practique la eutanasia a un animal peligroso.
Si un perro lo ataco, contacte a un abogado de mordidas de perro en Chicago en Staver Accident Injury Lawyers, P.C. Cuando usted esta tratando de recuperar del seguro del dueño de la mascota, obtenga ayuda con una demanda de lesiones personales en la corte, su caso puede ser afectado por si el perro es considerado o no un "animal peligroso" bajo la ordenanza de Chicago.
La sección 7-12-050 del Código de Chicago define cuándo un perro u otro animal de compañía puede considerarse un animal peligroso según la ley de Chicago. Si presenta una denuncia por mordedura de perro o comportamiento amenazador de un animal, el director ejecutivo o un agente de control de animales debe evaluar su reclamación y, si es necesario, investigar más a fondo los hechos que rodean al animal potencialmente peligroso. Esto puede incluir entrevistarle a usted, al propietario del animal y a los testigos del ataque, así como observar al animal. A continuación, el funcionario determina si el perro se ajusta a la definición de animal peligroso.
Un animal peligroso bajo el Código de Chicago significa:
Si la investigación de la agresión que le causó las lesiones concluye que el perro era un animal peligroso, puede exigirse al propietario la eutanasia. Sin embargo, esto no siempre se ordena después de un ataque. Dependerá de las circunstancias, del alcance de sus lesiones y de si el perro ha atacado a alguien o ha sido calificado de animal peligroso con anterioridad.
Si no es necesario sacrificar al perro, el propietario debe cumplir otros requisitos, como asegurarse de que el perro está vallado en una zona, colocar un cartel que indique que hay un animal peligroso en las instalaciones del propietario y utilizar un bozal y una correa seguros cuando el perro esté fuera de la propiedad del propietario.
En cuanto a su demanda por mordedura de perro, la conclusión de que el perro es un animal peligroso puede ayudarle. Se trata de una prueba que su abogado puede utilizar para demostrar que el dueño del perro fue negligente al controlar o asegurar a un animal que el dueño sabía o debería haber sabido que podía ser agresivo. Esta negligencia, ya sea dejar suelto al animal o no ponerle un bozal, es la razón por la que usted está lesionado y merece una indemnización.
Si el perro estaba previamente etiquetado como animal peligroso y el propietario no cumplía la ley en el momento del ataque, usted tiene pruebas aún más sólidas de negligencia. En esta situación, el propietario no puede alegar que no sabía que el animal podía ser agresivo o atacar a alguien. Es evidente que el dueño conocía las tendencias peligrosas del perro y estaba obligado por ley a mantenerlo confinado o con bozal y correa mientras estuviera en público.
Cuando ha sido atacado por un perro, tiene derecho a intentar obtener una indemnización por daños y perjuicios del propietario o de la persona que controla a ese perro. Si se determina que el perro es un animal peligroso según la ley, esto le ayudará a ser indemnizado por su:
Sin embargo, incluso si el animal no se considera peligroso en virtud del Código de Chicago, todavía puede presentar una demanda por lesiones personales y tratar de demostrar que el propietario fue negligente en el control del perro, lo que lleva a sus lesiones.
Entendemos lo traumático que puede ser ser herido por un animal que pensabas que sería amistoso. Sabemos de primera mano que las mordeduras de perro no siempre son pequeños pellizcos en los talones. Pueden ser lesiones significativas y debilitantes que conducen a graves gastos médicos, discapacidad y desfiguración. Estamos aquí para ayudarle a recuperarse de esta situación y seguir adelante después del ataque.
Si usted ha sido atacado por un perro y herido, póngase en contacto con nosotros hoy en (312) 236-2900 o rellene nuestro formulario de contacto en línea para programar su consulta gratuita.
Cuando se lucha por la máxima indemnización, sabemos lo que hace falta para conseguirla.
