Cada año se producen unos 30.000 accidentes de tráfico mortales en Estados Unidos. Los ingenieros municipales, los expertos en seguridad del transporte y la industria automovilística dedican innumerables recursos a la lucha por maximizar la seguridad y salvar vidas. Aunque esa lucha a menudo termina en límites de velocidad más bajos y normas de tráfico más estrictas, algunos se preguntan si tal vez el aumento de los límites de velocidad es realmente una parte importante de la prevención de accidentes.
Muchos expertos en seguridad creen que la velocidad mata y que cuanto más alto es el límite de velocidad más peligro corre la gente. Sin embargo, los estudios sobre la validez de esta teoría son contradictorios. Décadas de investigación y recopilación de datos demuestran que los límites de velocidad más altos no provocan más accidentes. Aunque no provocan un mayor número de accidentes, sí provocan accidentes más graves. Sin falta, los estudios demuestran que a medida que aumentan los límites de velocidad en las autopistas aumentan las víctimas mortales. Esto tiene sentido porque los accidentes a velocidades más altas son más graves por el mero hecho de la velocidad. Un choque a 50 kilómetros por hora puede convertirse en una tragedia mortal a 70 kilómetros por hora, ya que la alta velocidad provoca un impacto más fuerte en caso de colisión.
Aunque la gravedad de los accidentes y las muertes en carretera pueden aumentar con límites de velocidad más altos, el número de colisiones puede disminuir a velocidades más altas. Esto puede deberse a varios factores. Debido a la apreciación del riesgo, los conductores suelen estar más atentos y ser más cuidadosos cuando viajan a velocidades más altas. Cuando hay más gente prestando más atención y ejerciendo más precaución, se producen menos accidentes. Aumentar los límites de velocidad también tiene el efecto de "igualar" las diferencias de velocidad entre los conductores. Cuando más personas circulan a una velocidad similar, el tráfico es más uniforme, fiable y seguro. Como han concluido muchos expertos "la clave de la seguridad vial es un flujo de tráfico uniforme", independientemente de lo alta o baja que sea esa velocidad uniforme.
La teoría de los límites de velocidad más altos se ha probado en varios estados con resultados contradictorios. Cuando Nueva York aumentó la velocidad de las autopistas a 65 mph, los índices de colisión descendieron un 4%. Cuando Iowa aumentó los límites de velocidad de 55 a 65, los índices de colisión se dispararon. Por el contrario, el Automobile Club of Southern California descubrió que el aumento de los límites de velocidad en todo el estado no provocaba más accidentes.
Aunque los estudios son dispares, la tendencia futura podría ser velocidades más altas para maximizar el flujo de tráfico uniforme. Sin importar dónde conduzca ni a qué velocidad, preste atención y limite las distracciones. Nuestros abogados de lesiones personales atienden a clientes en toda el área de Chicago, incluyendo Aurora, Elgin, Hinsdale, Joliet, Naperville y Waukegan. Si ha sufrido un accidente causado por un conductor que excedía el límite de velocidad, contacte hoy mismo con un abogado especializado en accidentes automovilísticos de Staver Accident Injury Lawyers, PC, en Chicago, al (312) 236-2900 .
Cuando se lucha por la máxima indemnización, sabemos lo que hace falta para conseguirla.
